Si el desayuno os da quebraderos de cabeza aquí os dejamos un lista de ideas para tener alternativas a los desayunos de siempre
Uno de los retos que te encuentras al ser padre es la pelea mañanera por el desayuno. Unos nunca tienen hambre, otros sólo quieren alimentos ultraprocesados y llenos de azúcar como los cereales, y los menos, comen con hambre pero se aburren rápidamente de lo que les das. Como por la mañana vamos como locos como para ponernos a hacer grandes platos en este post os traemos algunas ideas rápidas y sanas para el desayuno de los peques y, por qué no, de toda la familia.
1. Yogur natural mezclado. En nuestra casa es un clásico. Ponemos una base de yogur natural o griego y en la mesa dejamos varios botes de cristal con cositas para añadir: pasas, pipas, avena... Se las echan al yogur y ya tienen una mezcla de lo más nutritiva y rica rica. Además al elegir ellos qué echar les da sensación de independencia.
2. Fruta. Un plátano en rodajas, kiwis en trozos, fresas... Cualquier fruta bien presentada es un desayuno fresco y saludable. En casa además de las anteriores la pera, la piña o las frambuesas nunca fallan. Los míos la fruta es de lo que mejor comen, ¡mucho mejor que los mayores!
3. Galletas de espelta. A veces nos quedamos dormidos y entonces toca correr... Cada vez en el mercado empieza a haber productos más saludables. Aunque no sean de lo mejor que ofrecer, algunas galletas como las Galletas de espelta del Mercadona no están mal para apuros. Y ñam ñam, están riquísimas!
4. Tostadas. Requieren un poco más de tiempo de preparación, así que normalmente nosotros tiramos de ellas los fines de semana. Un pan de cereales o de centeno con un chorrito de aceite de oliva virgen extra es un gran placer. Y si no te van las cosas integrales con un pan sano de pueblo (no industrial) y un poco de mantequilla puedes tener un desayuno para chuparte los dedos!!
5. Tortilla. Sí señores. En nuestra casa a veces la desesperación llega a tal punto que si no apetece nada ofrecemos una tortillita a la francesa. Es una manera rápida y muy nutritiva de que vayan al cole con una buena reserva. Le puedes añadir atún, queso o lo que te apetezca, pero nosotros la solemos hacer simplemente con huevo y una pizca de sal
6. Queso. Con el queso hay para todos los gustos. Siempre que sea lo más natural posible lo podéis ofrecer con membrillo, mermelada, nueces... Un recurso que suele haber en la nevera y que es rico y sano
Y vosotros, ¿qué desayunáis?
En Vamos al colegio SL ayudamos a los colegios a gestionar los uniformes escolares Leer más
